Ayer celebramos el cumpleaños de mi sobrina...11 añazos yá, como pasa el tiempo ¡¡¡ es que habiendo niños cerca se nota más...ja,ja,ja.
Cuando llegué a su casa, me esperaba emocionada con sus nuevos recortables...sabe que me encantan...a si que mientras recortaba los cuerpecillos de las modelos, y sus correspondientes trajes, me transporté lentamente, a esos momentos vividos a su misma edad...
Yo siempre fuí una niña muuuyyyyy tímida, tenía amigas (que aún sigo manteniendo), pero siempre me gustó estar en casa, con mis recortables, con los trapos que le pedía a mi madre para hacerle trajes a mi adorada Nancy...en fín, disfrutaba en la intimidad de mi creatividad, de mis sueños, de mis pasiones...
Siempre recuerdo con mucho cariño, las recortables que te regalaban al comprar chiches de FIESTA con sabor a sandia ¡¡¡¡ aún puedo percibir su olor...eran chiquititas, y llegué a tener toda la colección...las tenía metidas en un libro...les contruí una casa de carton, con muebles hechos de plásticos y cosas que encontraba...vamos, totalmente ecológica y recicable, ahora que lo pienso... ¡¡¡ fuí una visionaria¡¡¡ ja,ja,ja con lo de moda que está ahora ser "verde" ja,ja,ja.
Es un placer, poder seguir disfrutando nuevamente de esas cosas que me hicieron tan feliz en mi infancia...y sobre todo, poner como escusa a mi sobrina, para no parecer una loca ¡¡¡ ja,ja,ja aunque quien me conoce, no duda que lo sea....ja,ja,ja
El recuerdo es el perfume del alma.
George Sand
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